Aspectos relevantes de la inversión en cannabis medicinal, mediante crowd growing, y tributación de los rendimientos obtenidos.
Quizá a los más ufanos en la materia del Crowd Growing y el Cannabis Medicinal no sea preciso introducirles en este “mundillo”, pero para el resto se hace necesario definir conceptos y poner negro sobre blanco algunas cuestiones previas de suma importancia. Fue en 1967, quedando aún unos cuantos años de vida al régimen del General Franco, cuando España prohibió el cultivo, producción y venta de cannabis; y, a la fecha del presente, prohibido sigue.
No queremos entrar en el debate sobre si deben, o no, legalizarse las actividades relacionadas con el cannabis, puesto que no es el objeto de este blog entrar en debates morales que escapan a nuestro ámbito profesional de actuación.
Un ciudadano cualquiera puede estar sentado en el balcón de su piso en la Gran Vía de Murcia a la vez que invierte en cannabis medicinal y obtiene pingües beneficios por ello. No es legal en España el cultivo, pero la inversión que haría ese ciudadano sería una inversión financiera que genera rendimientos; y esos rendimientos tributan ante el fisco, como todo en esta vida. Ya lo decía Benjamín Franklin, “no hay nada cierto, salvo la muerte y los impuestos”.
El Crowd Growing
Crowd Growing es un sistema de financiación. Novedoso pero un sistema de financiación simplemente. Se trata de un sistema de financiación que conecta a productores de cannabis con inversores particulares o empresas. Como en cualquier negocio o sector, gracias a las inyecciones de capital de los inversores, el proyecto puede llevarse a efecto y retornar en buenas rentabilidades para el inversor.
Según Cannabis Inversión, el sistema más común de Crowd Growing consiste en apadrinar una planta o esqueje, es decir, el inversor paga un precio fijo por comprar un esqueje, este esqueje tiene un ciclo de vida determinado de enraizamiento, crecimiento, floración y secado, y la planta resultante ofrece un beneficio a su inversor.
Aunque el lector desconozca por completo el mundo del cannabis, debe “sonarle” lo que hemos descrito en los 2 párrafos anteriores. Piensen en cualquier empresa cotizada de la cual adquieren bonos con un rendimiento sobre el capital aportado; es exactamente lo mismo que el crowd growing. Inversor presta capital a un negocio a cambio de recibir la devolución de su capital más una rentabilidad que compense el riesgo.
El inversor no cultiva la planta de cannabis, no la posee, sino que simplemente presta su dinero a cambio de un beneficio. En definitiva, entrando en terreno fiscal, “rendimientos obtenidos por la cesión a terceros de capitales propios” por cuanto que el negocio jurídico que subyace en estas inversiones reúne las características que permiten asimilar dicha inversión a la figura jurídica denominada “cuentas en participación”.
¿Cómo tributar por los rendimientos obtenidos?
Los rendimientos obtenidos por la cesión a terceros de capitales propios son rendimientos del capital mobiliario que se incluyen en la base imponible del ahorro a efectos del IRPF; o bien, ingresos financieros a efectos del IS.
Este tipo de rendimientos tributan a tipos impositivos que van desde el 19% hasta el 26%. El 19% para rendimientos brutos de hasta 6.000€; si son superiores a 6.000€ e inferiores a 50.000€ al 21%; si se encuentran en la franja entre 50.000€ y 199.999€, entonces al 23% y, ya por último, los superiores a 200.000€ irán al 26%. Una tabla de progresividad que, como ven, es mucho menos onerosa, para el contribuyente, a nivel a fiscal que la base imponible general.
Obvio resulta que, hoy día, Hacienda no tiene la capacidad de conocer realmente los rendimientos que se obtienen por esta vía puesto que no recibe información de la contraparte como si sucede, por ejemplo, con los ingresos de nóminas o intereses de plazos fijos bancarios. Las plataformas de Crowd Growing no informan al fisco, aunque todo se andará, y por tanto es el propio contribuyente quién debe reflejarlo e incluir esos rendimientos en su IRPF.
Cuidado con enviar dinero desde nuestra cuenta en España
Debido a las limitaciones legales imperantes sobre el cannabis es bastante probable que las plataformas de Crowd Growing no permitan pagar con tarjeta de crédito o débito sino que pidan transferencias bancarias en moneda fiat o transferencias en el ecosistema de las criptomonedas.
Sin ir más lejos, plataformas de Crowd Growing como Juicy Fields, legalizada en Paises Bajos, te piden que transfieras el dinero mediante transferencia a su cuenta en Chipre o mediante criptomonedas. Si haces la transferencia desde tu banco español a una cuenta en Chipre es probable que tengas problemas, así que si estás decidido a invertir procura utilizar otros medios distintos de la transferencia directa desde tu cuenta bancaria para canalizar tu inversión.
Mucho cuidados con los riesgos de fraude
No obstante lo anterior, conviene tener un cuidado extremo con dónde invertís vuestro dinero, puesto que plataformas como la mencionada en el párrafo anterior han caído en quiebra de facto al imposibilitar los retiros de los clientes. Este tipo de inversiones tiene alta rentabilidad y, como cualquiera debe tener claro, alta rentabilidad está asociada a alto riesgo.
Cannabis medicinal y Crowd Growing: Un mercado en auge
Las rentabilidades que ofrecen estas inversiones son muy altas puesto que rondamos el 50% de rendimiento por un periodo de entre 3 y 4 meses; un ciclo muy breve en términos económicos. Reinvertido en sucesivos periodos, hablamos de rendimientos anuales brutos equivalentes al 135% aproximadamente. Son precisamente estas cifras, unidas a las perspectivas de regulación en multitud de países, las que están atrayendo grandes flujos de capital al sector.
Cabe destacar por ejemplo recientes noticias como que Formula Swiss AG de Suiza ha vendido una participación del 20% en Danish Formula Swiss Medical a Juicy Fields AG en un acuerdo que valora a la empresa de cannabis medicinal danesa en algo más de 13 millones de € al cambio. Puedes ampliar esta noticia por aquí.
Hasta aquí hemos tratado de explicar cómo funciona y tributa este mercado en auge, como habréis podido comprobar. No olvidéis que nuestros servicios de consultoría y asesoría fiscal están a vuestro servicio como expertos en la tributación de productos o activos no convencionales como el cannabis medicinal o las criptomonedas.